- Ah, ¿pero es abogado?
- Sí, ¿no lo sabías?
- No, le tenía por una buena persona.
Samuelito, de nueve años de edad, regresó de la sinagoga, y su mamá le preguntó:
- ¿Qué te enseñaron hoy?
- El rabino nos contó que Moisés se introdujo detrás de las líneas enemigas en una misión de rescate para sacar a los israelitas de Egipto. Cuando llegaron al Mar Rojo, Moisés dio órdenes a sus ingenieros para que construyesen un puente. Una vez que toda la gente pasó al otro lado, Moisés, para evitar que el ejército egipcio los persiga y les de alcance, llamó por su teléfono móvil al Cuartel General y pidió que de inmediato envíen aviones a bombardear y destruir el puente. Y así se salvaron todos los israelitas.
Su madre, incrédula, le preguntó:
- ¿Es eso lo que os contó el rabino?
- Bueno, en verdad no. ¡Pero si te cuento la versión del rabino nunca me creerías!
jajajaj...,
ResponderEliminarMuy bueno...
Un saludo.
Buenísimos los dos
ResponderEliminarjajajajaja, el de Moisés me ha encantado.
ResponderEliminarY la plaquita del albañil, obra maestra ;)