miércoles, 29 de octubre de 2014

Mi técnica

La mayoría de la gente considera hoy en día que pegarle un tortazo a un niño no es apropiado. Yo he probado otros métodos para controlar a mis hijos cuando tienen "uno de esos días". Uno que me resulta muy efectivo, es simplemente llevar al niño a dar una vuelta en coche, poco tiempo, con un cuarto de hora está bien. Durante el rato que dure la vuelta, no hablamos, solo nos miramos, y le dejo tiempo para que reflexione sobre su comportamiento. 

No sé si se trata de las suaves vibraciones del vehículo mientras se desplaza, la brisa, los kilómetros recorridos, o simplemente el hecho de que el niño se aleja un rato de las distracciones habituales: tele, videojuegos, ordenador, etc... El caso es que mis hijos, después de la vuelta en coche, están muchísimo más tranquilos. Creo que el contacto visual que tenemos durante todo el tiempo, es lo que realmente consigue estos resultados tan buenos. 

Os muestro una de las fotos que hice durante una de estas sesiones, por si queréis adoptar la técnica.